Cinco indígenas tzeltales originarios de San Juan Cancuc, que habían sido acusados desde 2022 por el presunto homicidio de un policía municipal, fueron liberados tras presentar pruebas que demostraban su inocencia, según informó el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas.
Los liberados son Agustín Pérez Domínguez, Agustín Pérez Velasco, Juan Velasco Aguilar, Manuel Santiz Cruz y Martín Pérez Domínguez, quienes permanecían en el centro penitenciario de San Cristóbal de las Casas desde su arresto en mayo y junio de 2022.
La decisión se derivó de un amparo interpuesto por los acusados, en el que aportaron evidencia que, según sus defensores, deslinda de cualquier culpabilidad las acusaciones en su contra.
Organizaciones como la ONU, así como agrupaciones de la sociedad civil, respaldaron el proceso legal mediante recursos como el amicus curiae, argumentando que las detenciones habían sido arbitrarias y que existían violaciones a los derechos humanos.
El caso había sido objeto de fuertes críticas por la criminalización de defensores del territorio: algunos de los liberados formaban parte de agrupaciones que defienden los derechos indígenas y ambientales en la región tzeltal. La organización Fray Bartolomé de las Casas celebró la decisión y reconoció el apoyo de activistas y colectivos que exigieron su liberación.
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